Al llegar la Navidad quiero enviarles mi felicitación y mis mejores deseos de salud y de paz en la celebración de la fiesta de la solidaridad de Dios con la humanidad, por la cual se hace hombre y se encarna en un Niño indefenso para devolver la dignidad a todos los seres humanos, sea cual sea su condición, raza, clase social o religión.

 

Al finalizar este 2015, en donde celebramos el Año por las Vocaciones Hospitalarias y el Año de la Vida Consagrada, quiero desear a los Hermanos, Colaboradores, Benefactores, Pacientes y sus familias que el niño Dios nazca en nuestros corazones e ilumine con su luz nuestra vida, fortaleciendo nuestros lazos como familia de San Juan de Dios.


Que en esta Navidad el Señor recién nacido nos inspire a impulsar el quehacer de la Orden, por lo tanto  invito a Hermanos, Colaboradores y Voluntarios a vivir la Hospitalidad  con pasión y compromiso y a continuar identificándose con el carisma de la Orden Hospitalaria.

 

Que el espíritu de la Navidad les traiga grandes esperanzas y el discernimiento para fijar un horizonte claro y definido para la realización de metas personales, profesionales y de la Orden Hospitalaria para el próximo año.

 

La Navidad es tiempo de esperanza, de soñar con un mundo mejor donde la hospitalidad sea el compromiso incondicional que permita aportar un visón de servicio a las nuevas generaciones.

 

Es también tiempo de reflexión y de proyectar el porvenir.

 

El próximo año 2016 se presenta lleno de retos y propósitos para que la misión de la Orden se cumpla a ejemplo de nuestro Padre San Juan de Dios. Con la apertura de la Puerta Santa, el Papa Francisco dio inicio en Roma el pasado 8 de diciembre, al Jubileo Extraordinario de la Misericordia, que tiene como lema “Misericordiosos como el Padre”. Es por eso que invito a todos a vivir el Jubileo Extraordinario de la Misericordia, como una oportunidad para expresar el amor y la misericordia de Dios, y para crecer en el compromiso de hospitalidad con el prójimo. 

 

Deseo para todos unas felices fiestas de Navidad y un próspero año nuevo 2016, especialmente para todos los Hermanos y Colaboradores, que en estos días estarán junto a los enfermos y a los usuarios de nuestros Centros; a ellos mi más sincero agradecimiento y reconocimiento, ya que son la expresión viva de la hospitalidad al estilo de San Juan de Dios.


También quiero expresar un saludo fraterno a todos los pacientes que se encuentran en las diferentes instituciones hospitalarias de la Orden, a ellos y sus familias nuestros mejores deseos en esta Navidad. 
 

Que en estas festividades, la Orden Hospitalaria brille con la luz del recién nacido y la espiritualidad hospitalaria de poder servir con amor y gratitud.

 

Hno. Juan Carlos Tovar Huertas OH
Superior Provincial